700 kilómetros son muchos. Más si tienes que recorrerlos a través de la selva amazónica, bajo la lluvia del Trópico, superando desniveles, ríos, barro y humedad extrema. Pero ninguno de estos obstáculos pudo con Arthur. Este perro vagabundo acabó siendo el quinto miembro de un equipo sueco de corredores que participaban en el Campeonato del Mundo de trekking, en Ecuador.
Todo empezó en una de las etapas finales del campeonato, mientras los cuatro miembros del equipo Team Peak Performance se preparaban para una travesía selvática de 40 kilómetros. A la hora de comer, el capitán del equipo Mikael Lindnord lanzó distraídamente una albóndiga a un perro sin dueño que rondaba su mesa.
Cuando emprendieron ruta, todavía tardaron unos cuantos kilómetros en darse cuenta de que el animal, al que llamaron Arthur, les seguía. Desde aquel momento no volvió a separarse del grupo.
A todos los efectos, se convirtió en un corredor más. Cuando alguno de ellos desfallecía, Arthur permanecía a su lado. Cuando Arthur se hundía en el barro, cosa que ocurría a menudo, le sacaban entre todos. Cuando el equipo enfrentó el último tramo de 60 kilómetros en kayak... el perro nadó a su lado.
Fue un momento imprevisto, ya que el equipo había dejado a Arthur en la orilla por consejo de la organización. Pero no pudieron evitar que el perro se lanzara al agua e insistiera en permanecer junto a ellos. Al final tuvieron que subirlo al kayak e incluso protegerlo con abrigos, ya que el agua fría le hacía tiritar.
El equipo no ganó la competición (puede que en parte debido a los retrasos provocados por el animal), pero sí un nuevo y leal compañero, con el que cruzaron la meta como duodécimo mejor equipo de trekking del mundo.
Y entonces, el momento de tomar una decisión: ¿dejarían a Arthur donde lo encontraron?¿Cómo podrían hacerlo después de tantos kilómetros y tanto sufrir juntos?
Ayer finalmente el perro llegó a Suecia, donde conoció a su nueva familia oficial. El capitán Lindnord le ha adoptado y ahora es un oficialmente escandinavo. Además de estar desde ya en nuestro salón de la fama perruna particular junto a Ran Tan Plan, Milú, Idéfix y Pancho, el perro millonario.
