Vuelta al mundo de Magallanes y Elcano

10.06.2019 a las 01:03 hs 581 0



Organización del viaje

Fernando de Magallanes nació en Sabrosa, distrito de Vila Real, en la región norte de Portugal, en 1.480.
En marzo del año 1.505, con 25 años, Magallanes se alistaría en la armada
de la India Portuguesa, una flota de 22 barcos fue enviada para instalar
a Francisco de Almeida como primer virrey de la India. Se sabe que
permaneció ocho años, y que estuvo en Goa, Cochín y Kilwa, participando
en varias batallas, entre ellas la batalla naval de Cananor en el año 1.506 , donde fue herido. En 1.509 partió con Diego Lopes de
Sequeira a la primera embajada en Malaca, después de llegar a Malaca en
septiembre, fueron víctimas de hostigamientos, y decidieron retirarse.
Al servicio del nuevo gobernador, Alfonso de Albuquerque, participó junto con su amigo Juan Serrão en la conquista de Malaca en 1.511.



Magallanes en 1.517 fue Sevilla con el cosmografo portugués Rui Faleiro organizador científico del primer viaje
de circunnavegación alrededor de la tierra, y encontraron en la Casa de
la Contratación aceptación para el proyecto, que daría a España la
oportunidad de llegar a las Molucas por el oeste, es decir, por los
mares que no están reservadas a los portugueses, según el tratado de Tordesillas. Se puso en contacto con Juan de Aranda, y ambos consiguieron que en
1.519 llegase su proyecto expedicionario a manos de Carlos I quien
recibió al portugués en Valladolid.
El cartógrafo de origen portugués Diogo Ribeiro quien comenzó a trabajar
en España desde el 1.518, en Casa de Contratación en Sevilla participó
en el desarrollo de mapas utilizados para el viaje. Después de
desacuerdos con el cosmógrafo Rui Faleiro, Fernando de Magallanes
continuaría el proyecto con cinco naos: la capitana Trinidad (110 toneladas y 55 tripulantes), la Concepción (90 toneladas y 55 tripulantes), la Victoria (85 toneladas y 42 tripulantes), la Santiago (75 toneladas y 32 tripulantes) y la San Antonio (120 toneladas y 60
tripulantes), en total 256 hombres, cargadas de provisiones previstas
para dos años (galletas, sardinas arenques, higos y siete vacas que les
proporcionaban leche fresca). Fue la llamada flota de las Malucas.


La escuadra partió de Sevilla el 10 de agosto de 1.519, sa flota descendió por el Guadalquivir hasta llegar a
su desembocadura, en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), puerto del océano
Atlántico. Durante las siguientes semanas, Fernando de Magallanes y los
capitanes de las naos iban y venían a Sevilla en sus falúas para atender
diversos imprevistos y allanar algunas dificultades mientras se acabó
de avituallar la escuadra.
La expedición zarpó de Sanlúcar de Barrameda el 20 de septiembre, se
dirigió a las islas Canarias haciendo escala en Tenerife. Continuaron la
navegación pasando frente a las islas de Cabo Verde y las costas
de Sierra Leona. Tras bordear la zona cercana a la costa norte de
África, la flota navegó a través del Atlántico hacia América. El 3 de
octubre de 1.519 el tiempo empeoró con viento, borrascas y corrientes de
agua por lo que la flota tuvo que detenerse por miedo a naufragar,
navegando sin rumbo fijo hasta que pasara la tempestad. Durante esas
tormentas, vieron frecuentemente los fuegos de San Telmo.
Bordeando la costa de Brasil, llegaron a la bahía de Santa Lucia (Río de Janeiro)
el 13 de diciembre, donde hicieron un breve descanso, continuaron hacía
el sur y exploraron la gran boca del río Solis (Río de la Plata)
haciendo escala el 12 de enero. Siguieron por el litoral de la
Patagonia, llegando al puerto San Julián el 31 de marzo, donde buscaron
refugio para pasar el invierno. Las provisiones se agotaban, los días se
hacían más cortos y los hombres tenían frío. Magallanes decidió
entonces reducir las raciones de comida.



Paso del estrecho de Magallanes

Los capitanes Juan de Cartagena, Antonio de Coca, Gaspar de Quesada y Luis de Mendoza se amotinaron contra el Almirante por
desacuerdo con el mando, pretendiendo regresar a España por considerar
que la expedición había fracasado, al no haber encontrado hasta entonces
el paso al océano Pacífico. Entre los amotinados estaba Juan Sebastián
Elcano. Esta insurrección fue reprimida con la muerte de Mendoza,
capitán de la Victoria. Magallanes condenó a muerte a Quesada, que fue ejecutado, y desterró a Juan de Cartagena y al clérigo Pedro
Sánchez de la Reina, que fueron abandonados en aquellas tierras cuando
partieron. Perdonó a más de 40 hombres por ser necesarios para la
expedición.



Después de cinco meses de espera, durante el cual el Santiago que en un viaje de reconocimiento se hizo añicos contra las rocas en la
desembocadura del río Santa Cruz , y su tripulación pudo ser rescatada,
pero al fin Magallanes había encontrado el estrecho que ahora lleva su
nombre, pero el que bautizaría como estrecho de Todos lo Santos en honor a ese fecha (1 de noviembre de 1.520).
Entre el 21 de octubre y el 27 de noviembre de 1.520, pasó el estrecho que
une los dos océanos. Cruzarlo fue muy difícil, dado lo complicado de la
costa. Para ello una nave se adelantaba en exploración buscando el mejor
camino y volviendo sobre sus propios pasos para hacerse seguir por el
resto hasta la zona explorada. Una vez terminadas estas minuciosas
etapas consiguieron salir del laberinto hacia el océano Pacífico. El 28
de noviembre salieron al mar del Sur, al que denominaron con el nombre
de mar Pacífico o mar de las Damas por los suaves vientos alisios que soplaban.
Durante el paso del estrecho se perdió otro barco, pero esta vez durante un motín el San Antonio al mando del portugués Esteban Gómez, abandonaba la flota por falta de
víveres para volver a España, el 1 de noviembre de 1.520 y retornó a
Sevilla llegando el 6 de mayo de 1.521.


Muerte de Magallanes

Por el océano Pacifico navegaron durante tres meses en condiciones calamitosas, los marineros murieron a
mansalva al carecer la tripulación de agua y provisiones frescas y, en
consecuencia, padecieron de escorbuto. Cuando los víveres se agotaron,
llegaron a alimentarse de cuero, ratas, y todo lo que encontraban.
El 6 de marzo de 1.521, cuando ya la tripulación estaba diezmada por el
hambre, abordaron la isla de Guam, perteneciente ahora al archipiélago
de las islas Marianas, que ellos llamaron islas de los Ladrones, que las llamaron así porque los indígenas entraban en los barcos y
robaban todo cuanto encontraban. Continuaron hacia el oeste en dirección
a las Filipinas.
El 16 de marzo llegaron a la playa de San Lázaro, en Cebú, isla perteneciente al
archipiélago de Filipinas, donde establecieron buenas relaciones con los
nativos. Las tripulaciones se abastecieron, descansaron y se
recuperaron.
Para asegurar una alianza con un jefe indígena de la región, Magallanes se propuso
derrotar a su enemigo Lapulapu, el jefe de la isla de Mactán. Antes del
ataque, Magallanes envió emisarios a Lapulapu para que cesara en su
empeño de combatir y se sometiera a la Corona española, oferta que
Lapulapu rechazó, siendo así considerado aún hoy un líder
independentista en Filipinas.
En la madrugada del 27 de abril de 1.521, Magallanes y 50 de sus hombres
llegaron a la playa de Mactán para luchar contra Lapulapu y 1.000 de sus
hombres. Magallanes estaba tan seguro de su victoria que pidió a los
otros capitanes que no se involucraran en la lucha. Como la marea estaba
baja tuvieron que dejar los barcos lejos de la costa, con lo que
Magallanes y sus hombres llegaron agotados por haber tenido que caminar
casi un kilómetro por el agua.



Ya en la playa, a medida que avanzaba la batalla, los hombres de Magallanes empezaban a quedarse sin municiones y los de Lapulapu
avanzaban. Un indígena le clavó una lanza en la pierna a Magallanes,
haciéndolo caer. En ese momento todos los indígenas corrieron a él y lo
lancearon, falleciendo en combate. Los españoles perdieron la batalla y
Magallanes había caído en combate sin haber llegado siquiera a las
Molucas, las islas de las Especias, que se encontraban a solo unos días.



A su sucesor, Duarte Barbosa, lo mataron a traición en Cebú, junto a 30 de sus hombres en un banquete trampa organizado por el Rajá. El resto de
la expedición decidió abandonar Cebú y en la isla Bohol acordaron, al
solo quedar 108 hombres para gobernar las tres naves, quemaron la que en
peor estado se encontraba, que era la Concepción, distribuyéndose entre las otras dos. También se decidió nombrar como
jefe de la expedición a Juan López de Carvalho, hasta entonces piloto
mayor de la flota.

Llegada a las Molucas

A finales de septiembre de 1.521, los miembros de la expedición acordaron destituir a Carvalho como capitán
general por mala conducta, nombrando a Gonzalo Gómez de Espinosa su
nuevo jefe, capitán de la Trinidad. También se acordó poner a Juan
Sebastián Elcano al frente de la Victoria. Dispusieron continuar la navegación hacia las islas de las especias. Llegaron a las
islas Molucas el 7 de noviembre de 1521, atracando en la isla de Tidore
al día siguiente. Se había elegido Tidore como puerto de arribada porque
habían oído que era el que tenía más clavo que el resto de las islas.
Es más probable que esta decisión se hubiese tomado al saber que los
portugueses se habían granjeado prácticamente la amistad del gobernante
de Ternate.
El sultán Tidore se acercó a los barcos españoles en una canoa, fue llamado Almanzor por los españoles, y comenzaron a comerciar.
El 18 de diciembre de 1.521, con las dos naves cargadas de clavo, se
dispusieron para partir de regreso a España. Sin embargo, ese mismo día
se descubrió una vía de agua en la Trinidad, haciendo necesaria una larga reparación. Se acordó que la Victoria volviera a España por la ruta de la India y que la Trinidad se quedase en el puerto de Tidore para ser reparada y regresar por el
Pacífico hasta Panamá. El día 21 la Victoria partió en solitario hacia
el oeste con 60 hombres incluyendo 13 tidoreses.
Espinosa completó la reparación de la Trinidad el 6 de abril de 1.522 y se hizo a la mar con 53 hombres, pero los
continuos temporales impidieron su avance, y una fuerte tormenta daño
gravemente la nave. Pidió auxilio al capitán portugués António de Brito
que se encontraba cerca, lo que ocasionó que los 17 hombres que quedaban
en la embarcación fueran hechos prisioneros por los portugueses. Cinco
de ellos, entre los que se encontraba Espinosa, regresaron a Europa y
serían liberados en 1.527.
 



Retorno a España de Elcano

Elcano, al mando de la Victoria, atravesó el océano Índico y dando la vuelta a África, evitando
cuidadosamente los puertos africanos, controlados por los portugueses,
completó la primera circunnavegación del globo. Regresó a la costa
española y recaló en Sanlúcar de Barrameda el 6 de septiembre de 1.522.
Elcano, deseoso de llegar a Sevilla, apenas se detuvo en Sanlúcar de Barrameda.
El mismo día de la llegada tomó a su servicio un barco para remolcar la
Victoria por el Guadalquivir hasta Sevilla, por el mal estado en que se
encontraba la nave. Los oficiales de la Casa de la Contratación de
Indias de Sevilla prepararon una lancha con 12 remos, cargada de
provisiones frescas. Dos días después atracaba en Sevilla la Victoria.
En el muelle esperaban las autoridades de la ciudad y los miembros de la
Casa de la Contratación en pleno, junto a un numeroso público que
contemplaba la llegada de la desvencijada nave. Aquel día los navegantes
no desembarcaron. Solo lo hicieron a la mañana siguiente, en camisa y
descalzos, con cirios en las manos y en procesión. Se dirigieron a la
iglesia de Nuestra Señora de la Victoria y a la capilla de la Virgen de
la Antigua de la Catedral de Sevilla, a la que se habían encomendado
antes de iniciar el viaje. La nao Victoria fue descargada.




Secuelas

En 1.525 , poco después del regreso de la expedición de Magallanes ,
Carlos V envió una expedición dirigida por García Jofre de Loaisa para
ocupar las islas Molucas, alegando que estaban en su zona, según el tratado de Tordesillas. Esta expedición incluía a los navegantes españoles más notables: Juan
Sebastián Elcano, que perdió la vida entonces, y al joven Andrés de
Urdaneta. Llegaron con dificultad a las Molucas o islas de las Especias. El conflicto con los portugueses ya establecidos en las inmediaciones ocasionaría enfrentamientos a causa de la posesión.
Puesto que no había un límite establecido por el este, en el año 1.524 ambos
reinos habían tratado de encontrar la ubicación exacta del antimeridiano
del tratado de Tordesillas, que dividía el mundo en dos hemisferios iguales y para resolver el problema de las Molucas. Una
junta se reunió varias veces sin llegar a un acuerdo, y cada uno dio las
islas a su soberano. Se alcanzó un acuerdo sólo con el tratado de Zaragoza, firmado el 1529 entre España y Portugal, atribuyéndose las Molucas a Portugal y Filipinas a España.

Quien te conoce papa?

Puntos: 463


Comentarios (16)


Cargando comentarios espera un momento...
No tienes permisos para comentar.
Para poder comentar necesitas estar Registrado. O.. ya tienes usuario? Logueate!